Fue un gran concurso y muy entretenido por la innovación de saltar y recortar toros embolados de fuego, esto hizo que los asistentes se divirtiesen a la vez que vieron cuatro emboladas en el ruedo de los toros que concursaron, por las cuadrillas de emboladores Mubiter de Sagunto, El Chato y la cuadrilla de emboladores de Cella que embolaron el toro de la final.

Se lidiaron cuatro toros de Villamarta cuatreños de excelente trapío y condiciones para los recortadores. Disfrutaron al máximo a la vez que dieron un extraordinario espectáculo, no fue ningún impedimento que los toros estuviesen con fuego, incrementando así la dificultad en los saltos y recortes, al contrario hizo que el espectáculo fuese innovador y con un atractivo distinto evitando el aburrimiento.